Cómo hacer Cerveza Artesanal en casa

Cómo hacer Cerveza Artesanal en casa

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La cerveza artesanal acompaña al hombre en su vaso desde que fue descubierta en la Mesopotamia 10.000 A.C aproximadamente, son múltiples los procesos químicos que se llevan a cabo para que a partir de sus ingredientes junto a cambio de temperatura se elabore una de las bebidas más tomadas de la humanidad.

En Paraguay la afición a la Cerveza Artesanal se inició en el 2005 aproximadamente. Desde entonces esta práctica la llevan adelante personas que fabrican cerveza sin fines comerciales, los cuales desarrollan esta actividad en su gran mayoría por el placer que les genera elaborar su bebida favorita.

Al convertirse en algo cada vez más habitual, se fueron abriendo diferentes negocios, principalmente en Asunción y alrededores que se dedican a vender insumos y equipamiento para la elaboración de cerveza artesanal (Ej.: El Alquimista, Brewing Home Paraguay, entre otros).

Un maestro cervecero reveló cuáles son las claves fundamentales para una buena cerveza, y explicó cómo hacerla de manera casera en el hogar, sugirió dos puntos importantes:

  1. El agua no debe tener cloro. En caso de no contar con un filtro hogareño, la mejor opción es comprar el agua por bidones del supermercado, tienda de conveniencia o similar.
  2. Los granos de malta deben estar partidos por la mitad. Por lo general, las casas especializadas en venta de insumos lo hacen por nosotros, pero en caso de adquirir malta sin moler, se puede utilizar un molino de maíz.

¿Qué se necesita para hacer cerveza en casa?

Se necesita una fuente de calor, la hornalla de la cocina, un mechero o un pequeño equipo de cervecero casero. Es ideal contar con ollas de acero (si nos estamos iniciando las ollas de aluminio nos servirán temporalmente), un cucharón para remover y un termómetro para mantener la temperatura adecuada.

Primer Paso: Maceración

Se coloca por 90 minutos la malta de cebada en una olla de agua caliente, que tenga una temperatura de entre 67 y 70 grados, teniendo en cuenta que por cada kilo de malta se deben utilizar 3 litros de agua. Revolver para que no se generen grumos indeseados.

Aquí el almidón se transforma en azúcar y se obtiene el mosto, un líquido dulce y denso.

Segundo Paso: Hervido

Luego de la recirculación y clarificación, pasar el mosto a otra olla donde la prepararemos para hervir. Mientras tanto, completar el proceso de lavado de granos ingresando agua a la olla de maceración, y de esta a su vez pasarla a la olla de hervor. Medir densidad (con un densímetro) para saber cuándo cortar el lavado del grano. Llevar el líquido a ebullición durante 60 a 90 minutos (dependiendo la receta). En este proceso agregar las distintas adiciones de lúpulo para dar amargor, sabor y aroma.

Tercer Paso: Enfriado

Consiste en bajar la temperatura del mosto (que viene de estar a 100º C) a la temperatura de inoculación de las levaduras, que no debe ser mayor a 25º C. Esto se hace con filtros de placas, enfriadores contracorriente, o más casero, sumergiendo una serpentina de cobre en un balde de agua helada, etc. A partir de este momento se deben extremar las medidas de limpieza y sanitización, ya que hasta la etapa anterior no había problemas de contaminación debido a que en el hervor se esteriliza todo. Trabajar con alcohol 70% es una gran herramienta a partir de ahora.

Cuarto Paso: Fermentación

Se vierte la mezcla de mosto y lúpulo en un recipiente para la fermentación, que puede ser un bidón de agua. Allí se le agrega la levadura, que convertirá los azúcares del mosto en alcohol. Al recipiente debe hacérsela una trampa de aire para que salga el aire pero para que no entre. Una técnica habitual para este paso es utilizar un bidón de agua y colocarle en su extremo un globo pinchado. La fermentación lleva aproximadamente 15 días y como resultado se obtiene cerveza sin gas. El recipiente para la fermentación debe ser conservado en un ambiente oscuro cercano a los 19º C.

Quinto Paso: Embotellamiento

Una vez terminada la fermentación debe pasarse la cerveza a otro bidón. Esto se hace para descartar toda la cama de levaduras que se formó en el fermentador y dejar descansar el mosto antes del embotellado. Si este proceso, que dura una semana, se puede realizar en frío mucho mejor, ya que se clarificará de mejor manera la cerveza.

Aquí también debe hacerse la técnica de carbonización natural con azúcar en el embotellado. Para ello se crea un almíbar, el cual se coloca en el madurador antes de embotellar. Para realizar el almíbar se calcula 7 u 8 gramos de azúcar por litro. Con una mínima cantidad de agua se calienta el azúcar hasta dejarlo hervir por unos minutos, luego se lo añade al mosto, revolviendo suavemente, sin que la cerveza tome contacto con el aire para evitar su oxidación.

Posteriormente, la cerveza se coloca en las botellas, las cuales deben ser tapadas y luego se aguarda 10 días más. La manera de darse cuenta si la cerveza está lista es abriendo alguna botella y servirla en un vaso, si se observa que tiene gas, la misma ya está óptima para consumir, sino hay que esperar unos días más.

Un dato importante es que para que el proceso de carbonización sea exitoso las botellas deben guardarse a temperatura ambiente y nunca en la heladera, ya que el frío afectaría a las levaduras y no se realizaría la carbonización, arruinándose la cerveza.

Sexto Paso: Degustar

Una vez finalizado el proceso se puede degustar y consumir la cerveza artesanal casera junto a familiares y amigos.

1 Comentarios

  • Higinio Samaniego - 5 years ago
    Muy buen blog bien explicado.

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